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sábado, 17 de septiembre de 2016

El ultimo plañido de Yeni Vilcatoma

La congresista derramando lagrimas al salir del cónclave fujimorista en un restaurante de La Molina

Mientras el Frente Amplio cumplía el axioma de que la izquierda siempre estaría dividida, sus antípodas, la derecha popular, la DBA, representada fielmente por el fujimontesinismo, una crisis interna por el huracán llamado Yeni Vilcatoma. He aquí la crónica y el análisis de su despedida por la puerta chica.


En consabido que los partidos políticos no gozan de estabilidad. A menos que el dinero este constante y sonante y los favores se paguen. Así es nuestra deplorable clase política. Se preocupa más en sus intereses personales que de las personas que los eligen. Por eso vivimos en un país jodido. No obstante, cuando los partidos expresan fricciones es que están padeciendo una crisis. Algo que no fue ajeno Fuerza Popular y cuyo protagonista principal es Yeni Vilcatoma. 

¿Quién es ella y que acontecimiento cambio su vida? Sigue leyendo.

Durante el gobierno de Humala, una triada de procuradores les hizo frente al investigar los casos de corrupción que supuestamente vinculaba a la pareja presidencial. Sin embargo, husmear demasiado les costaría sus cargos. Primero cayó Cristian Salas, luego Vilcatoma y, como broche de oro, Julia Principe fue injustamente defenestrada. Si bien cada uno cumplió a cabalidad su trabajo, el mismo que gozo de la aprobación popular, fue Vilcatoma la que pusó en jaque al gobierno conyugal cuando en diciembre de 2014 difundió un audio con el entonces ministro de Justicia y DD:HH Daniel Figallo. La conversación giraba en torno al hoy preso y exasesor Martín Belaunde Lossio. Con el material se denunciaba la presión gubernamental para favorecerlo porque ella era procuradora que investigaba el espinoso caso la "Centralita". Por tal revelación el ministro la despidió ante cámaras. Aunque salio fortalecida y salto a la palestra, dejo estupefacto tanto a tirios como troyanos al anunciar su candidatura congresal bajo el amparo del partido naranja Fuerza popular. Su lema era luchar contra la corrupción. ¿Hablaba en serio o le lavaron el cerebro?

Yeni Vilcatoma postulo con el número 2 de la lista congresal
Lógicamente, la consigna de "luchar contra la corrupción" fue un gancho publicitario que el fujimontesinismo supo aprovechar muy bien. Cohesionando el nuevo discurso de Keiko en un discurso ofrecido en la universidad de Harvard, Vilcatoma refrescaba la imagen de un cuestionado partido ligado al latrocinio sistemático cuando fueron gobierno (1990-2000).  Y, efectivamente, convencía a parte del "elactarado" desmemoriado. Ya sabes que todo vale en política. 

Electa con el número 2, alcanzo a obtener el quinto lugar a cuanto votación parlamentaria (entre los diez más votados). 


La postulante sonriendo feliz junto a la excandidata Keiko Fujimori
Juramento y todo estaba bien. Hasta que una propuesta suya que no fue aceptada desencadeno su alejamiento de la bancada naranja. ¿Cuál era? El proyecto de ley que unificaba todas las procuradorias en una Procuraduría General de la República. Según palabras de ella, la nueva institución sería "independiente y autónoma". A finales de agosto se enfrento a Osias, quien es hermano del controvertido financista naranja -y actualmente investigado por lavado de activos- Joaquin Ramirez. Este proponía algo parecido con la excepcion que solo toquen la procuradoria anticorrupcion mas no las demás -como la de lavado de activos-. Luego vino el tete a tete acalorado entre su colega Ursula Letona ante la Comisión de Constitución del Parlamento. Nuevamente por la misma propuesta de marras. .Evidentemente, al fujimontesinismo no le interesaría semejante idea. Vilcatoma no estuvo contenta y advirtió que renunciaría. Cabe resaltar que la mayoría de los 73 congresistas naranjas, solo una minoría esta inscrito al partido. O sea, el resto, como invitados, puede irse cuando quieran. La cúpula preocupada por esa posibilidad estuvo preparando una ley contra el transfuguismo, según lo divulgo el semanario Hildebrandt en sus trece. Este altercado con Letona fue la gota que impaciento al fujimontesinismo. Por ende, se realizo ayer un cónclave en un restaurante limeño de La Molina. ¿Con qué objetivo? Para un proceso disciplinario. El día jueves denuncio en RPP al rabioso cancerbero naranja Hector Becerril. "Como mujer, no puedo permitirle a nadie que me encierre en un lugar, me agravie, me grite, un poco más me pegue", dijo. Señalo que iba a denunciarlo ante la Comisión de Ética.

Tras varias horas, Vilcatoma se retiro al promediar las seis de la tarde. Sin ofrecer declaraciones a la prensa, se le noto triste y llorosa. Imaginamos que habrá sido victima de un incesante bullying. Luego sus colegas mostraron su extrañeza ante lo sucedido.

Si Vilcatoma sabia de que pie cojeaban los fujimontesinistas, ¿para qué integrarse a ellos?

Algunos dicen que la congresista peco de ingenua, o que también pensó en reformar ese partido mafioso vinculado con peliagudos escándalos. Podemos hacer una analogía con el séptimo capitulo de la octava temporada de Los Simpsons titulado "El soso romance de Lisa". A grosso modo nos relata como Lisa Simpson pretende convertir o reformar al iracundo Nelson (ambos son estudiantes de la misma escuela). Sin embargo, a pesar de su idealismo, no puede lograrlo.



Vilcatoma ha demostrado no someterse ante el poder político. ¿Podemos afirmar que posee una férrea dignidad? Hasta el momento, sí. 


¿Se la puede comparar con Carlos Ferrero?

Si hablamos de renuncias al fujimontesinismo, se nos viene a la mente Carlos Ferrero. ¿Te acuerdas que le apodaron "traductor" cuando era premier del gobierno de Alejandro Toledo? Ya que hiciste un esfuerzo para recordar te contamos que el también perteneció al fujimontesinismo en los 90. Pero el no se fue al instante de ser elegido, sino casi a postrimerías de la dictadura. En 2000 ya era una prominente figura del partido de Toledo. Por ende, la comparación resulta anacrónica. Tampoco se puede comparar la cantidad de veces que fustigo el carácter autoritario del fujimontesinismo porque Vilcatoma no se ha referido al pasado corrupto de la bancada.


¿Se viene la escisión naranja?

Tarde o temprano comenzaran las fisuras en el fujimontesinismo. Sin un Fujimori y Montesinos presentes, que estén ahí como en los tiempos que se reunían en SIN, no pueden sostenerse. Los leales al partido son pocos y la mayoría son invitados. Cuando vean que sus intereses no son escuchados o tomados en cuenta no resistirán la idea de largarse y formar un grupo disidente o asociarse a otras bancadas. Ahora son 72, Vilcatoma sentó un precedente y, tal como se rumoreo, cuatro querían abandonar el barco. Si en la izquierda hay problemas de división, ¿el fujimontesinismo es inmune a ellos? No, a menos que sean apristas. Bye.

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